Buscando una aguja en una pajar.
Cuando asumí este reto pensé siempre en positivo. Nunca pasó por mi mente claudicar. Ahora un año más tarde me he dado cuenta que nada cambiará, que la misma gente quiere ser así como es; creyente de chismes, adoradores del rumor y sobre todo cargada de envidia y maldad. Como me gustaría ser niño otra vez y retroceder 30 años. Cuando mi mundo estaba lleno de verdad, respeto y sobre todo lealtad.
Cuando niño confiaba, ahora ya no se quien es quien: que le ha pasado a sociedad, porque ha cambiado tanto en solo 30 años; o mejor porque se han perdido 30 años en la sombra de los sinvergüenzas, desleales, cizañeros y decrépitos mentales que se dejan influenciar por cualquier sujeto que haragán que se la quiere levar fácil y ganando más. Ahora entiendo porque se le dice “criollada” a la mala fe de un peruano. Ahora entiendo porque nos marcan como “sudakas” cuando salimos a otro país y nos miran siempre mal. Como me gustaría ser niño y retroceder 30 años.
Cuando veo a mi hija, vivaracha, me pregunto si ella será como todos los peruanos de hoy. La respuesta es obvia. Sí. Y eso me pone triste porque se que por mayor dedicación le ponga en su formación mayores tentaciones tendrá, y es que si no se adapta al sistema de corrupción que gobierna nuestro país en todos los niveles, simplemente ella nunca podrá llegar lejos. Verdad señores políticos, funcionarios corruptos del sector publico, administradores de justicia que venden su conciencia por grandes fajos verdes, o señores periodistas de todos los gobiernos que ponen su pluma al mejor postor y si no lo hacen ustedes lo harán los dueños de los medios donde ustedes trabajan.
Debemos trabajar, nuestros hijos deben comer y así seguirá la cadena. Mientras nuestros maestros se mueren lentamente, con TBC, o con otra enfermedad que provoca la mala alimentación, porque eso a los gobiernos no le importa ni le importará. O no es así señor gobernante, que pudo educar a sus hijos en las mejores universidades del mundo gracias al esfuerzo de los peruanos. Y ahora a toda esta “figura de moral” y buenas costumbres, ética y correcto proceder, súmale las campañas de salud integral para casi 30 millones de peruanos, con hospitales limitados y carentes de todo.
Como me gustaría retroceder 30 años y ser niño para no darme cuenta de nada y seguir viviendo en mi mundo ideal sin maldad ni corrupción, sin que nadie se dedique a maletear y chismear del otro. Pero eso ya no sucederá. Ahora me he dado cuenta que nada cambiará, que la misma gente quiere ser así como es; creyente de chismes, adoradores del rumor y sobre todo cargada de envidia y maldad.
Seguiré buscando ese ideal porque en algún lugar deben existir personas sin prejuicios ni maldad, será como buscar una aguja en un pajar, pero debo seguir y nunca dejar de buscar.
Dedicado a los que nunca cambiarán y en su cerebro sólo esta trepar sin importar pisotear. A los chismosos y mediocres que se dedican a engañar. Y a los criollos, que siempre le sacan la vuelta a la norma. Y a los que desayunan en horario de trabajo, les regalo estas líneas para que nunca dejen de maletear.
Trujillo, 19 de julio del 2010.
Estos cachimbos dieron lo mejor de cada uno para hacer un equipo, el equipo de cachimbos de ciencias de la comunicación de la UCV, el primer equipo de esta facultad en campeonar en el torneo inter cachimbos de las diferentes escuelas profesionales de esta casa superior de estudios. Felicitaciones jóvenes y que los mismos éxitos deportivos se vivan a nivel cognitivo y gracias por darnos este triunfo.
