lunes, 15 de diciembre de 2008

Obituario

QPD y DDG

La peor desgracia que le ocurrió a mi vida fue que la humillen, la maltraten tanto como yo maltraté una vez a ese ser que dio todo sin pedir nada. Y nunca me di tiempo de pensar en ello, para pensar en el dolor que causas por una simple estupidez.
No quiero escribir pero tampoco quiro llorar; entonces no me queda mas que escribir con sufrimiento, líneas negras del dolor humano, tristes apagadas, como si quisieran identificar la dicha de la felicidad, esa que he perdido en el ayer.
Y es aquí donde mis temblorosas manos y mis sonrojados ojos brillan de pena, donde cada gota lleva una historia de sufrimiento que yo he causado, con mis manos al desprender de mi alma, mi vida lanzándola al vacio del olvido y de la soledad.
Ahora en este último rezo, antes de partir en un frio carruaje hacia el silencio total, quiero dejar en alto mi voz partida para señalar que mi amor será el mismo desde el inicio hasta el final. Donde el fuego avivé una vez, quiero regar para que rosas negras puedan crecer y marcar un lugar para nunca olvidar en una segunda navidad.
Que tu alma no amada pueda dejar de llorar en algun lugar de todo el vacio que te toca vivir en tu inmensa soledad.
El autor.

No hay comentarios: