sábado, 7 de junio de 2008

Más de policias...

Quienes tenemos la suerte de pasear por las calles de Trujillo - ahora violentas - hemos visto en más de un oportunidad a jóvenes policias de apenas 20 años, menudos ellos y bajitos. Con esas caras de niños crecidos a la fuerza (por dinero o por servicio como ellos mismos lo llaman), no garantizan la seguridad de nadie. Cuántos no hemos visto a estos jóvenes intentar poner orden en las pistas de la ciudad y los conductores (no todos por su puesto), se rien de ellos.

He oido más de una historia sobre los mismos "chiquillos", con sueldo seguro de por vida, que portan el uniforme policial y un revolver calibre 38. El que les falten eñ respeto es normal dicen algunos, es que son "mocosos" dicen otros, y al final el que sigue perdindo es el ciudadano que reclama más acción y menos burocracia. Comprenden ahora por qué la delincuencia está mejor preparada que nuestras fuerzas del orden. esto solo pasa en el Perú.

La cultura y los valores tienen mucho que ver en todo esto. El caracter es otro ingrediente indispensable en el cambio, ese que ya debe empezar desde casa, y no esperar que la cambien los profesores del nido de la primaria y del colegio.

Sumen a todo ello, las noticias sobre policias recien salidos de las escuelas de sub oficiales, que mueren atropellados por inexpertos o por confiados, además de las muertes que se registran en las comisarias por manipulación inadecuada del arma de reglamento. Parece un cuento de nunca acabar, y estoy seguro que terminará cuando se entienda que el gobierno debe de verdad invertir pues en educación, salud y agruciltura.

Pero eso nunca podrá ser, a los "grandes" les conviene el caos, mientras mas confusos los de la clase trabajadora, mientrs mas ignorantes y mientras menos saludables se encuentren, podrán limitar sus acciones y asi iniciará la cadena viciosa otra vez.

Delincuncia, policia joven, falta de cultura y para coronar la violación de las normas con ayuda con ayuda de la misma ley o sin ella. Viva el Perú carajo!!!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo que realmente hace falta en todas las instituciones del Estado, como la PNP, es un Pinochet ¡carajo! (que contagiosa palabreja), además de educación, disciplina y menos improvisación.

Anónimo dijo...

esto me huele a mala parodia de una cronica sobre los policias mocosos publicada en el blog www.panoaburrirme.blogspot.com